Echa un vistazo a mi currículum

Sígueme en Instagram...

...y en Facebook

Mail de Contacto

miércoles, 7 de junio de 2017

Jenga morfosintáctica.

El otro entré en una tienda Tiger (de esas que son la perdición de todas nosotras...) y volví a comprar un montón de cositas que podéis ver pinchando aquí. El caso es que, entre las muchas cosas con las que volví a casa, está este material que particularmente es uno de mis preferidos:
10€ en tiendas Tiger
Se trata de la jenga de toda la vida, a la que se juega tirando un dado y quitando "ladrillitos" del color que nos toque en el dado (evitando, eso sí, que la torre se venga abajo). Vi hace un tiempo una entrada del blog de Lenguaje en flor una adaptación de este juego super chula (pincha aquí si quieres verla) y en cuanto he tenido tiempo, me la he llevado a mi terreno y he hecho mi propia versión ya que mi jenga no es la misma. Con este juego podemos trabajar estructuración de oraciones de sujeto+verbo+predicado, aprovechando para intentar ir un paso más allá creando "frases locas", o sin sentido pero bien estructuradas gramaticalmente.


Cada frase que consigamos hacer con las piezas que tengamos antes que caiga la torre, vale 1 punto. Sin embargo, en la adaptación os adjunto también una serie de imágenes asociadas a las frases que se pueden formar si conseguimos juntar tres bloques del mismo color. La manera de jugar que tengo con estas imágenes es, si conseguimos formar una de las que aparecen en las imágenes, sumamos doble (2 puntos en vez de uno). Así trabajamos atención, asociación de frase a imagen y comprensión, ¡y de paso le añadimos emoción al juego! Podéis jugar con ellas u obviando las imágenes; no son imprescindibles para poder pasarlo bien con nuestra jenga.


Los textos de las frases los he pegado encolándonos; es decir: 

1. Recortamos el texto
2. Echamos un poquito de cola blanca en nuestro "ladrillo" con la ayuda de un pincel
3. Colocamos el texto encima 
4. Volvemos a echarle cola por encima, de nuevo con el pincel.

De este modo quedan muy bien pegadas, no se mueven, y no resbalan. Me planteé la posibilidad de plastificarlas, e incluso de ponerle velcro para poder cambiarlas tantas veces como queramos, peeeeroo.... No resulta funcional porque se trata de un juego de equilibrio, y si ponemos velcro las piezas ya no encajan correctamente y es más fácil que se caigan (al igual que si plastificamos, corremos el riesgo de que los bloques se resbalen).

Si queréis darle más usos podéis encolar por debajo palabras sueltas con las que crear historias, o incluso fonemas para que nos digan tantas palabras con ese fonema como bloques hayamos conseguido etc, etc... ¡Imaginación al poder! Yo de momento, para ahorrar tiempo, trabajo asociando los fonemas que estoy trabajando a cada uno de los colores (por ejemplo: verde claro = fonema /r/; verde oscuro = sinfones con /r/; rosa claro = fonema /l/; rosa oscuro = fonemas con /l/ etc.), y les pido después que, si tienen 4 bloques rosa claro, por ejemplo, me digan cuatro palabras con el fonema /l/. Del mismo modo también podéis encolar imágenes y pedirle a vuestros pacientes que, cuando caiga la torre, os digan qué es, para qué se usa y dónde podemos encontrar lo que les haya tocado (una idea genial para daño cerebral, afasias, anomias....). 

Os aconsejo que corráis hasta vuestro Tiger más cercano y os pongáis manos a la obra, porque este juego engancha a pequeños y mayores.

Como siempre, pinchando en la imagen tenéis acceso a la descarga. 



Os dejo también un vídeo, para que podáis entender mejor la dinámica de este juego. Podéis verlo pinchando aquí

¡Feliz día para todxs! 

3 comentarios:

  1. Me parece una idea y un juego genial para hacer con los niños ..

    ResponderEliminar
  2. ¿Se puede hacer con la otra que hay de menor tamaño en Tiger?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Imagino que será cosa de hacer las etiquetas un poquito más pequeñas :)

      Eliminar